Stana Katić, conocida en Castle por su identidad como Katherine Houghton Beckett, nació el
17 de noviembre de 1979 en Manhattan. Su abuelo era un mago aficionado y con
frecuencia después de la escuela, la llevaba a la tienda de magia de los famosos
Drake, hecho que resultó clave para su posterior fascinación por el arte. Otra
de sus grandes aficiones son los cómics, admiración que desarrolló gracias a su
padre, un fanático del béisbol.
Beckett fue a Stuyvesant High
School, una escuela pública en la ciudad de Nueva York reservada para estudiantes superdotados. Posteriormente, estudió Derecho en Stanford, donde su
sueño era convertirse en la primera mujer presidente del Tribunal Supremo de la
Corte Suprema, antes de tener que trasladarse a la Universidad de Nueva York después de
la muerte de su madre.
El 9 de enero de 1999 cuando
tenía 19 años, su madre Johanna es apuñalada hasta la muerte cuando se
dirigía a reunirse con Juan y Sara para cenar. El
detective encargado de la investigación (John Raglan) nunca fue capaz
de encontrar al asesino y atribuyó su muerte a la violencia de las pandillas callejeras.
Kate,
sin embargo, a lo largo de la serie remarca la teoría de que había algo más en
el asesinato de su madre que una muerte del azar, llegando a pensar que los
detectives que investigan el caso de su madre ignoran todas las demás pruebas
que podrían conducirlos al asesino.
La muerte de Johanna supuso un grave
golpe para su padre, que se convirtió en un alcohólico. Este hecho fue un duro golpe
para Kate y es por ello que siempre usa el anillo de bodas de su madre como un
encaje de cuello de "la vida que perdió" y el reloj de su padre por “la
vida que guarda”.
Por otra parte, la muerte de su
madre inspiró a Beckett para convertirse en un policía: ser una detective que
en realidad vela por la justicia y el bien de las víctimas de las familias. Aparte
de sus principios, otro hecho importante en su elección fue la posibilidad de tener una
posición de fuerza desde donde pudiera investigar más en profundidad la muerte
de su madre.
Después de pasar los tres
primeros años de su carrera como policía ahogándose en pena en el fichero de su
madre sin encontrar nada nuevo que investigar, la protagonista de la serie decide
finalmente olvidarse del tema y evitar profundizar en el caso. Tras esta decisión, Beckett se
convierte en una detective del Departamento de Policía de Nueva York, específicamente
en la 12º del Distrito Electoral de Homicidios, donde trabaja con otros
detectives como Javier Esposito, Kevin Ryan y Lanie Parish, bajo
el mando del capitán Roy Montgomery.
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