La casa de los horrores

Imagínese… Por un segundo, por tan solo un segundo ser el Appropiate Adult ( un asistente social que en Inglaterra se asigna a los menores de edad o a personas con trastornos cognitivos para ayudarles a comprender su proceso judicial) de la persona mas miserable del mundo: Fred West.

Escuchar, empatizar e intentar comprender la locura que sufre para capaz de asesinar a sangre fría a doce jóvenes, entre ellas su hija Heather

Imagínese escuchar como descuartizo a cada una de sus victimas para luego enterrarlas en el jardín.  Imagínelo mientras un escalofrió recorre su cuerpo y su mente vuela recreando que usted puede ser la siguiente…

Imagínese meterse en la piel de Fred West: el asesino que sembró el terror en la calle Cromwell. Detrás de una mirada inquietante y una permanente sonrisa burlona  se encierra el alma de un hombre deshumanizado capaz de experimentar el dolor hasta límites insospechados.

Su falta de escrúpulos le llevo al incesto, la violación, el voyeurismo, el proxenetismo, la pedofilia y el asesinato de al menos, doce jóvenes. La mayoría de ellas eran las niñeras de su diversa prole, otras fueron secuestradas mientras esperaban en  la parada de autobús. Posteriormente las descuartizaba y las enterraba en el jardín  y en el sotano de su casa.

Durante sus numerosos interrogatorios policiales Fred West contaba “verdades a medias” ;  era un mentiroso compulsivo que evadía las preguntas policiales mientras mentalmente elaboraba una estrategia para evitar ir a la cárcel. Nunca confeso que su cómplice era su mujer, Rose West; a la declaro en todo momento que era inocente.

West mientras engañaba a la policía, confesaba sus crímenes y desnudaba su compleja personalidad a su Appropiated Adult: Janet Leach.

Una trabajadora social que accede voluntariamente sin ánimo de lucro a pasar horas y horas con el psicópata con el único objetivo de ganarse su confianza para intentar que sea honesto y cuente toda la verdad a la policía.

En el intento de alcanzar este objetivo establece un vínculo de amistad con Fred West, al que sigue visitando durante su estancia en la cárcel, incluso después de finalizar su colaboración como Appropiate Adult para la policía.

Entre ellos establecen un vinculo muy especial, o al menos así lo pensaba Janet; quien acabo totalmente decepcionada cuando descubre que Fred West nunca la tuvo aprecio y solo la utilizo emocionalmente para dar celos a Rose, su mujer.

Rose West  era prostituta bajo el consentimiento de su marido. Obligaba a sus hijos  a participar en las orgías que mantenía con las jóvenes a las que después torturaba y asesinaba.

Fue cómplice de todos los asesinatos y cometió sucesivas barbaridades como matar a una de las jovenes y sacarla el bebe que llevaba dentro. Aunque nunca confeso la autoría de los crímenes pero era la principal sospechosa de ayudar a Fred en los asesinatos.